Ave mala

Quizás ese pájaro,
Que hoy tuvo el atrevimiento,
De posarse sobre mi cabeza.
Se llevó lo último,
Mi poco de alegría.

Que en color es
Similar al cuervo,
Pero que en cuerpo,
Es parecido al carpintero,
¡Desgraciada ave!
¡No soy yo ficus, no soy pino!

Quizá se llevó la chispa.
Acaso existiera en mí, vida.
Para que de noche al día,
Se la lleve el pájaro a sus crías.

Podría, empero, haber visto,
Aquel pájaro atrevido,
En mí, no humano,
Sino gusano.

¿Hora de merendar?
Mal agüero.
Ahora, por culpa del cuasi cuervo,
Terminó doliéndome el cuello.

¡Búscate a tu semejante!
Pero aquí no, en Petare.
Ladrón de alegría,
Deja de robarme la vida.

En la infinita oscuridad,
El olor a Brea,
Y en tus garras siniestras
Me perdí buscando mi luz, alegría.

Ave mala,
No te atrevas a colocar,
En la cabeza de los demás,
Mi secuestrada felicidad.

Comentarios